Cómo utilizar los bastones de senderismo
Técnicas para ir con bastones en cuestas y con pequeños obstáculos
Si elegimos utilizar bastones en nuestras actividades montañeras debemos saber utilizarlos correctamente para que nos resulten realmente útiles, en caso contrario nos pueden molestar más que ayudarnos.
Principalmente los bastones en subida te van ayudar a progresar y retrasarán la aparición de la fatiga, sin embargo en bajada van a constituir un elemento de estabilidad y equilibrio.
Subir cuestas con bastones
En las subidas, los bastones bien utilizados ayudan a descargar el esfuerzo que hacen nuestras piernas, lo que agradeceremos cuando llevemos unas horas de marcha.
Cuando vamos en subida y la pendiente no es muy importante, colócate la dragonera y camina ayudándote de los bastones acompasando los pasos con el movimiento de tus brazos.
En esta situación la coordinación es fundamental y hay que seguir el movimiento natural de la marcha: el bastón derecho se apoya cuando damos un paso con el pie izquierdo y viceversa.
En las subidas pronunciadas o tipo escalón, mantendremos las dragoneras puestas pero puede resultar más útil apoyar los dos bastones a la vez bien delante y cargar parte de nuestro peso sobre ellos para ahorrar esfuerzo a nuestras piernas a la hora de dar el paso.
Afrontar una bajada con bastones
A la hora de afrontar una bajada, la función principal de los bastones es añadirnos dos apoyos que nos ayudarán a mantener el equilibrio, lo que nos resultará especialmente útil si la bajada es técnica o resbaladiza.
En los descensos nos quitaremos las cintas o dragoneras de las muñecas, los bastones los adelantaremos por delante de nuestro cuerpo buscando buenos emplazamientos, nunca debemos poner el bastón en los lugares que sean buenos para apoyar nuestros pies.
Superar pequeños obstáculos
Por último, en las situaciones donde debemos hacer frente a pequeños obstáculos o pasos algo técnicos deberemos valorar si los bastones nos van a ayudar en esa zona o más bien nos van a molestar.
En el caso en el que debamos pasar por una zona en la que nos puede venir bien apoyar o ayudarnos de las manos, la recomendación es guardar los bastones para que no sean un estorbo.
Si vemos que nos pueden resultar útiles, la recomendación es utilizarlos siempre sin la dragonera, para evitar lesiones graves en caso de caída.